Miles de coches parados en garajes o calles. Coches sin movimiento durante largos periodos de tiempo que pueden provocar fallos en elementos principales de tu vehículo. Aquí os dejamos las que pueden ser las más habituales averías por inactividad del coche.
La inactividad de los vehículos según algunos expertos puede provocar averías peores que las que conlleva el desgaste del coche por estar en marcha.
Según un estudio reciente presentado por Autocasión, los fallos más frecuentes en un coche inactivo largos periodos se producen en:
Averías de coches por inactividad
- El motor
El motor es un elemento que necesita funcionar con normalidad al menos una vez al mes. Y es que de pasar largos periodos inactivo, los aros de los pistones pueden pegarse o el aceite perder sus propiedades.
- El circuito de refrigeración
La inactividad en motores refrigerados por agua pueden causar importantes averías en los manguitos, la bomba de agua o el termostato. Es importante revisar estos elementos para evitar fugas en los circuitos.
- Los neumáticos
Debido al tiempo que un vehículo pasa sin moverse, el peso termina por deformar los neumáticos. Se recomienda por tanto a los conductores que apoyen el coche sobre unas borriquetas, siempre y cuando sea posible.
- La batería
Las baterías se auto descargan aun estando en reposo, pues se cargan y descargan a través de reacciones químicas reversibles en las que intervienen tanto el electrolito de la batería (elemento líquido) como las placas acumuladoras. Se estima que las baterías sin mantenimiento, a una temperatura ambiente media, pueden perder diariamente en torno a un 0,15% de su carga, cifra que se incrementa en el caso de baterías en el final de su vida útil.
- Los elevalunas eléctricos
El motor que eleva el cristal se encuentra en la puerta y se expone a humedad. La inactividad del automóvil puede provocar que este se oxide con mayor rapidez.
- El aire acondicionado
Lo recomendable es que sean conectados al menos una vez al mes, así el compresor, las juntas de estanqueidad y el filtro se mantendrán en buen estado. Estos elementos también necesitan lubricarse para funcionar correctamente.
- La caja de cambios y los diferenciales
Necesitan aceite para mantenerse lubricados y evitar que se oxiden los piñones, sincronizadores o las horquillas.
- La bomba de agua, el limpiaparabrisas y los faros
Es posible que estos elementos fallen como consecuencia del consumo eléctrico que provoca un propulsor eléctrico agarrotado.
- La distribución
Los taqués pueden fallar por la falta de uso en el vehículo. El coche emite un sonido similar a un «taca-taca-taca» en la parte alta del motor.
- Las fugas de aceite
Los elementos encargados de la estanqueidad del motor necesitan contacto con aceite, es posible que de mantenerse durante un largo período sin actividad, las juntas se resequen y se agrieten. En este punto es recomendable revisar los tipos de filtros del coche para comprobar que están en un estado óptimo para buen funcionamiento del mismo.
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